martes, 3 de febrero de 2015

A la Salida de los Antro del Rock




El fin de semana pasado Sábado en la noche y domingo en la madrugada, me las ingenie para salir  ha mi vicio, mi Hobby y mi gusto de ir a escuchar algo de rock pop clásico en un lugar descrito en estas líneas entre algo fresón y estilo ingles con injertos de un bar al estilo de los estados bañados las aguas del río del Mississippi, El Dublín. Así como había comentado hace algunos días, era mi deseo de sentir ese tan imprégnante a olor a cigarro, a cerveza y el disfrutar unas rolas de buen rock alternativo, pop, hasta clásico, al más estilo  de Carlos Santana, del legendario Jimmy Hendrix o Eric Clapton, hasta oír interpretaciones de enanitos verdes, amenizado por la banda Sonico 57.

 Al terminar  las noche de antro, en el Dublín, después de la misión cumplida de haber pasado un rato agradable, opté por retirarme a descansar, si no antes tomar la calle de Zaragoza hacia la Plaza de Armas y  seguir por el paseo peatonal Ocampo, dentro del  primer cuadro de la ciudad, me puse a observar a varios parroquianos con cara de felicidad acompañados en grupo o de sus parejas, saliendo de varios bares, para buscar donde le seguirían a su reventón o irse a descansar

Por esa calle de Saltillo podemos encontrar toda la fauna metalera con la característica del pelo largo, sus chaquetas de cueros, con cadenas, y algunos con tatuajes en las manos y las damas rockeras con su atractivo estilo gótico de belleza extrema, con su saludo efusivo rockero, tan característico de los integrantes de esa cofradia, saliendo del Confesionario donde se presento un grupo de metal puro, de nombre Forged en compañía de su solista recién desempacada de las academias europeas del país germano, en esas latitudes del mundo termino su  actualización de los géneros del dumb, industrial y trahs metal, de nombre Paola Darkasi; según comentarios del dos comensales el York de Rótterdam  y Luzbel Vikingo, con quienes en su charla compartí una cena de Hot dog y sus enseñanzas, en la calle de Victoria y Ocampo, ambos compadritos venían engentados al ver también a Carlos Martínez la “Parquita” en el manejo de su Guitarra, según su dicho " era abismalmente chingo", a su vez, enamorados de la belleza  del angel de la noche, de la vocalista Darrkasi

Por otro lado, me topo con escena de película de Cantinflas, por ese rumbo  en el Bar. El Zapata, al estilo metalero del viejo oeste, ¿Por qué? Será el toquin es metal- rock, noooo!!!!, si no al entonar la banda Ando Borracho, en ese instante sacan los guardianes del orden las más estilo Hombres de Negro a un comensal guaripudo; quien intento de ingresar y otra ves ¡ Ando Borracho! Pa Fuera, amenazando en hablar a su tío Chilo para clausurar el lugar y pedir a San Esteban no se lo lleve la tira.

Ya para terminar, ahí cerca esta el Cerdo de Babel, con su particularidad de centro de las artes y cultura, un espacio tranquilo para deleitar música de trova, además para los gustosos de las artes platicas, disfrutar de salida las pinturas de los artistas locales


Bueno, así es la vida nocturna en el primer cuadro de la ciudad del ya merito, buen comienzo de semana

No hay comentarios:

Publicar un comentario